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Es el sistema tradicional de las persianas enrollables. La persiana se instala en cajones de obra empotrados, independientes de la ventana, con un cajón de albañilería y un registro de madera o metálico q puede ser hacia el interior o el exterior. En este sistema se permiten todos los tipos de lamas (curvas, rectas, delgadas, anchas, PVC, aluminio…) al no tener límite en las medidas de los cajones y grandes dimensiones de ancho. Actualmente existen unos cajones con fibras y corcho con estructura metálica prensada que soportan cargas de obra y son registrables por el exterior. Obtienen el más alto grado de aislamiento al estar separados de la ventana y sin conexión con el interior de la vivienda. El accionamiento puede ser con cinta, torno, cardan o motorizado.

Es un sistema pensado para poner persianas en las ventanas y puertas donde en origen no se habían instalado. Se colocan con cajón de aluminio laminado o extruido (no recomendable de PVC) por la parte exterior de las ventanas. No necesitan obras para su instalación. Las lamas de las persianas en este sistema, son curvas y delgadas para facilitar el enrollamiento en los cajones con medidas reducidas. Puede ser de PVC, aluminio laminado y aluminio extrusionado. El accionamiento puede ser con cinta, cordón, cardan o monitorizado.

Es el sistema más usado actualmente. La principal ventaja es que se coloca el cajón, la persiana y las guías junto con la ventana, formando un módulo “compacto” que facilita la instalación en obra nueva y en rehabilitación. Los cajones pueden ser de PVC, PVC con perfiles de aluminio o totalmente de aluminio extrusionado. Todos disponen de varios aislantes térmicos y acústicos, mejorando el aislamiento de la vivienda. Las láminas pueden ser de PVC, aluminio laminado y aluminio extrusionado de seguridad. Siempre tienen que ser curvas y delgadas para facilitar el enrollamiento en los cajones. El accionamiento puede ser con cinta torno, torno integrado o motorizado.